El día de ayer estaba leyendo sobre el mundial de Fortnite, que se realizó hace unos meses atrás, que repartió U$ 30 millones y el ganador de 16 años se llevó U$ 3 millones. Para mí fue bien impresionante escuchar estas cifras, sin embargo, lo que más me llamó la atención es que en el mundial solo 100 personas compitieron, pero para la ronda de clasificación participaron 40 millones de personas!!!.
Vamos uniendo puntos, como decía el célebre Steve Jobs, aunque estos no parezca que se unen.
Los estrenos de Netflix, Strangers Things y La Casa de Papel, tuvieron 40 millones de visualizaciones y casi 20 millones de visualizaciones, en su día de estreno, respectivamente.
Se espera que para este 2020 los eSports generen más de U$ 1.500 millones en ingresos en el mundo, y el número de participante crece año a año. La ANFP, yendo a la vanguardia, creó el año pasado la liga de eSports de Chile y el Equipo Deportivo de la Universidad Católica, hoy tiene un equipo con entrenador incluído.
¿Qué nos dicen estos números? ¿Qué nos muestran de las personas?
Si usted es dueño de una compañía, independiente que venda al detalle o en forma industrial, y finalmente quiere desarrollar una estrategia de ventas sustentable en el mediano y largo plazo, debe entender quien es su comprador hoy y en 5 años más. De esto se trata esta columna, de comprender cómo se comportan las nuevas generaciones, Millennials y Z. Los primeros, los Millennial, hoy tienen entre 24 a 38 años, ósea están comenzando su vida laboral y los más adultos incluso ya pueden dirigir su propias compañías.
La generación Z, aún no entran en el mundo laboral tradicional, pero eso no implica que puedan generar ingresos de formas alternativas.
Lo que debemos entender de ambas generaciones, que si bien Chile, es su país, su mercado es el mundo y por tal, su forma de consumir es totalmente distinta a las de generaciones anteriores. Y esto genera un desafío para cualquier empresa que quiera llegar a ellos con sus productos.
Lo anterior no solo se trata de estar en Redes Sociales, se trata de tener una estrategia sustentable de largo plazo, desde lo real a lo virtual, donde no vendamos, si no que entreguemos valor, contenido, educación, incluso inspiración, que permitan que estos nuevos consumidores que identifiquen con nuestra marca, se sientan contenidos y desde ahí se genere un vínculo que trascienda el tiempo.
